Un punto para valorar y crecer el que consiguió Patronato
2025-02-15
GM Distribuciones
El Rojinegro igualó 1-1 ante Güemes en Santiago del Estero, jugando con uno menos todo el complemento y con dos situaciones que pudieron dejarlo con las manos vacías. Alan Bonansea estiró su gran presente en Patrón.
Por: Gaby Obelar
En la previa el panorama no pareció ser tan complejo como terminó siendo. Patronato (y Gómez) decidieron salir con un esquema que es esas tierras nos parece funcionar. Deja vú del 2024, línea de cinco y un plantel que la pasó mal. Una historia que se volvió a repetir con distinto final.
Patrón no pudo hacer pie en Santiago del Estero, le costó todo. Desde la inclinación de la cancha del árbitro en todas las divididas hasta en el juego mismo. No pudo hilvanar más de cuatro pases el Rojinegro, que en contrapartida padeció mucho en defensa. Véliz desbordó siempre por el sector de Navas, Varela no hizo pie, a la vez, los recaudos lógicos y una obligación notoria: evitar cualquier tipo de choque o roce dentro del área.
El primer tiempo puede dividirse en dos aspectos. La gran doble atajada de Iván Cháves (la figura del Negro) y el automático "tiempo muerto" generado por Gómez, en el que le pidió al arquero Santo hacer algo de tiempo para reacomodarse. Desde ahí, merodeando el minuto 30 y algo, fue otro Patrón, que de alguna manera terminó mejor la primera parte.
Gabriel Díaz se quedó con la chance más clara de Patronato, luego de una individualidad poco clara de Pardo. Le faltó oficio de delantero al Monito, que hizo todo bien, se posicionó cerca del punto de penal, sin marca, la pidió y le pegó con la más habil, pero la bocha se fue por arriba del travesaño. Minutos más tarde, otro centro cerrado (¿marca registrada?) que peinó Bonansea (otro de gran papel siendo altamente funcional al equipo) que evitó Pezzini.
El primer tiempo la sacó barata Patronato, pudo irse en desventaja. De entrada, para el complemento, Castro y Puru, pero el plan cambió más rápido de lo esperado. Barinaga fue con la pierna arriba y de costado contra un rival, era amarilla, pero de noche, sin televisión y con Gastón Monzón Brizuela en Santiago del Estero terminó siendo roja para el mediocampista. 4 minutos de la segunda mitad y a remar contra la corriente y más.
Si en la primera mitad el Negro sufrió con 11, con 10 y parado de forma "tradicional" aguantó. Es más, hasta le quedó mejor en algún punto, aunque el arco rival quedó a kilómetros, se las arregló con Villarreal, Bonansea y Castro para sumar metros. Luciano Pacco también tuvo su debut, posicional y atrevido, ayudó en la transición y la tenencia de pelota.
Luego de otra intervención de Cháves, vistiendose de salvador tras un peligroso rebote en Bettini, llegó el premio mayor menos esperado. Centro precioso y preciso de Pacco a la cabeza de Bonansea para desatar el delirio de Patronato. Aguantó, aguantó y aguantó y, con uno menos, facturó. El tema, debió seguir aguantando. Ni el tiempo realizado por Iván para hacer correr el reloj impidió que Monzón Brizuela haga de las suyas, más de 10 minutos de adición.
Pérez desbordó, centro precisó al segundo palo. Gauna a la carrera y cerca del final, empate. Merecido para el local por todo lo generado. Patrón se llevó más que un punto, algo que pudo perder. Palacios Alvarenga se cerró dos chances clarísimas, la última con el arco a su merced. Fue un buen punto, por el partido, el tramite, el calor, la condición del árbitro, lo que se sufrió, aguantó y por jugar todo un tiempo con uno menos.
Cuatro puntos de seis posibles en sus primeros dos partidos y de visitante. Pese a que no pudo replicar la misma cara que en Lomas de Zamora, el Rojinegro volvió a sumar, en un reducto complejo. Un encuentro para sacar conclusiones ¿La línea de cinco para el arranque o solo para cerrar el partido? Además de aspectos individuales. Se viene San Martín de Tucumán en el Grella.
